CANTO A LA PAMPA

Canto a la Pampa, la tierra triste
réproba tierra de maldición

que de verdores jamás se viste
ni en lo más bello de la estación
en dónde el ave nunca gorjea
en dónde nunca la flor creció
ni el arroyo que serpentea
su cristalino bullir se oyó

Hasta que un día como un lamento
de lo más hondo del corazón
por las callejas del campamento
vibró un acento de rebelión
eran los halles de muchos pechos
de muchas iras, era el clamor
la clarinada de los derechos
del pobre pueblo trabajador

Benditas víctimas que bajaron
desde la Pampa llenos de fe
y a su llegada lo que escucharon
voz de metrallas tan solo fue

Baldón eterno para las fieras
masacradora sin compasión
quedan manchada con sangre obrera
como un estigma de maldición

Pido venganza para el valiente
que la metralla pulverizó
Pido venganza para el doliente
huérfano y triste que allí quedó
Pido venganza por la que vino
de los obreros el pecho abrir
Pido venganza para el pampino
que allí en Iquique supo morir


del Diario de la Compañera Herminia Concha (2003)